“Es mediante la distorsión de la realidad, cómo Ismael Lagares pretende impactar al espectador, llegando a su lado más emotivo.”
Lagares intenta reflejar una visión subjetiva a través del carácter expresivo de los medios plásticos; éstos, cobran una significación metafísica, abriendo los sentidos del espectador al mundo interior.
El fin es potenciar el impacto visual de quien observa, distorsionando y exagerando los temas. La fuerza psicológica y expresiva se plasma a través de los colores fuertes y puros, las formas retorcidas del collage y la composiciónes agresivas. No importa ni la luz ni la perspectiva, que se altera intencionadamente. El colorido es variado, la composición se diferencia entre zonas con materia y zonas de no materia, consiguiendo relieves pictóricos a través de unos empastes densos y en su mayoría vibrantes. La superposición de planos, la caligrafía automática, la combinación de técnicas…
También es aficionado, claro está, al reciclaje, a reutilizar los utensilios que seducen a los amantes de la pintura: los botes vacíos de pintura, los baldes donde se hacen las mezclas, trozos de papel que me imagino son sobrantes de obras en proceso… “cortados a ojo” de buen sabio para hacer equilibradas composiciones… Los combina, los repinta y los ofrece, fetiches de su arte, con natural humildad como diciendo “toma, no necesitas un gran cuadro, en estos fragmentos de papel está mi arte, está mi vida”.
Ismael Lagares, se mueve en el complejo terreno del expresionismo abstracto y el informalismo gestual y vitalista, haciéndolo con seriedad y contundencia. En su obra se mezclan la brutalidad con la sutileza, lo estrambótico y deforme con lo más cotidiano. También otros elementos como la sensibilidad, la violencia, lo grotesco, el caos, la conmoción, el sufrimiento y la belleza; aparecen esbozados inconscientemente en medio de circunstancias adversas.
Disfruta de la obra de Ismael Lagares en Pedro Peña Art Gallery.
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